Estudiaba en la universidad la primera vez que vine a Cancún de vacaciones.
Me impresionaron, de entrada, sus playas, la blancura de la arena, los colores del mar… y su gente, que tenía un acento tan diferente del mío norteño.
Además, había momentos en que creía escuchar otro idioma. Y descubrí que, efectivamente, hablaban maya.
Entonces decidí: «Aquí voy a vivir de grande».
7 comentarios:
mira.. y quién lo dirñia, no???
:-D
Mi querida
Me da gusto que hayas cumplido tus deseos, que hayas preservado en alcanzarlos.
Un beso sin arena blanca, ni aguas color turquesa; pero sí, con mucho afecto y admiración.
---Exenio:
Me has hecho reír. "Quién lo diría"...
Gracias por comentar, te mando un abrazo.
---Marichuy:
Pues tengo más... deseos de ese tipo que aún no se han cumplido... también dije que he de vivir un año en Venecia y no lo he logrado!!!... todavía.
Y te mando besos de admiración a ti, mi escritora de blogs favorita.
Hola!!!!
Hermoso blog, y súper-interesante, Te descubrí en el concurso de 20minutos.es, y me ha encantado tu espacio, te dejare un mensaje allá también,y te valoraré con los 5 puntos, porque te lo mereces..............volveré.
Un besote y abrazo de oso.
Entiendo.
Es lo mismo que me ocurre a mí con el Mediterráneo. Quizá algún día...
Un beso azul.
Tengo conocidos que han ido a Cancún de vacaciones y todos han contado las excelencias de la isla: clima, playas, hoteles, gentes...
A mi me encanta el mar y espero algún día poder disfrutar de esas aguas.
un saludo.
---Común, muchas gracias, aquí te espero, en la playa, jajaja. Ya te valoré a ti también, me gustaron mucho tus blogs. Besos.
---Ay Feranado (suspiro) el Mediterráneo es otro de mis mares, por no decir amores...
---Ipecan, aquí siempre serás bienvenido y ya verás qué bonito!!!
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